Cruz del Cordel

Realmente es un crucero, no una cruz aislada; es decir, el crucero consta de varios elementos siendo la cruz la parte más elevada (el coronamiento en sí). Es más, en este caso ni siquiera tiene cruz, pues el fuste del crucero aparece roto, habiéndose perdido por tanto el verdadero sentido del mismo. 

No obstante, su situación, características y entorno lo hacen distinto a los otros de la población. 

CRUCERO

Su denominación se debe a que se sitúa sobre una Vía Pecuaria, esa senda habilitada para la trashumancia desde tiempos del rey Alfonso X el Sabio, que conectaba los agostaderos del norte con los invernaderos del sur, y que antaño servía de vía de paso para animales nómadas de ganaderos que hacían de ese oficio su razón de entender el aprovechamiento pecuario. 

De hecho, otro elemento característico de este paraje es una antigua construcción denominada Casa de la Tía Ramona, antigua posada que todavía hoy presenta canterías de piedra en su fachada que evocan un pasado más activo en relación precisamente con esas columnas de ganado trashumante que transitaban por este lugar. 

De hecho, aparece en la jamba izquierda de la puerta principal una cantería con signos que se atribuye a la vecina Ermita de los Mártires, hoy desaparecida, y que realza la importancia que este lugar tuvo en centurias anteriores. Debemos comprender que los caminos buscaban el paso al lado de ermitas y templos, en un intento por acercarse a la Divinidad. Y este es un caso más. 

Pero además, en uno de los lados del camino sigue presente una gran piedra hincada de forma vertical con una inscripción que recuerda las prohibiciones de tránsito por ese lugar a quien no estuviera autorizado para ello. 

Y por si todo ello fuera poco, y regresando de nuevo al crucero de piedra que preside este lugar, si nos fijamos bien podemos comprobar que el plinto del mismo se encuentra agraciado con múltiples cruces grabadas en su piedra, y que ocupan todas las caras de esta base.